Torrijas de sobaos con salsa de chocolate

Llega una de las épocas que más me gusta en lo que a dulces tradicionales se refiere, y es que no hay nada como la Semana Santa para sacar ese lado dulcero y comenzar a preparar torrijas, buñuelos, monas...y un sin fin de comidas que seguro son tradición en cada casa.

Seguro que los que me seguís sabéis nuestra tradición del Viernes Santo " potaje de bacalao + buñuelos" tradición que nos inculcó mi abuela Isabel y que aun faltando ella, no se va a perder.

En el blog, en el apartado de RECETAS DULCES, tenéis una gran variedad de dulces de Semana Santa con los que deleitar a vuestra familia.

En esta ocasión he decidido versionar uno de los dulces más típicos, las TORRIJAS.

¿Y que pasa sin juntamos sobaos + torrijas? Pues que sale esto tan requetebueno que he hecho, es sí, abstenerse los poco dulceros de la familia, esto no es para ellos, jeje.

Es una mezcla de sabor a sobado y torrija...que no sabría deciros que predomina más, si un sabor u otro. Además con una deliciosa salsa de chocolate (que ya para mas rico aún, chocolate con leche y galletas María de Chocolates Clavileño) que aumenta más lo delicioso de esta delicatessen.

TORRIJAS DE SOBAOS CON SALSA DE CHOCOLATE

Cocinera: Mayte G./ Tiempo de preparación: 45 min./ Comensales: 10 (2 torrijas por persona)

Ingredientes:

20 sobaos pequeños

250ml de leche entera

100gr de azúcar

1 rama de canela

1 vaina de vainilla

La piel de un limón

1 huevo XL

Aceite de girasol (para freír)

Para rebozar: azúcar y canela en polvo

Para la salsa de chocolate: 250ml de nata liquida
                                                                       3 cucharadas de mantequilla sin sal

                                                                                 120gr Chocolate con leche y galletas María

Elaboración:

1.- En un cazo ponemos la leche junto con el azúcar, la rama de canela, la vainilla y la cáscara de limón. Lo calentamos a fuego medio hasta que el azúcar se disuelva. Una vez pasado esto, retiramos del fuego y dejamos que se temple. Quitamos la rama de canela, la vainilla y la cáscara de limón.

2.- Preparamos una sartén con abundante aceite y calentamos a fuego medio-alto. Batimos un huevo. 

3.- Remojamos cada sobao primero en la leche (que absorba bastante) y luego por el huevo. Freímos por ambos lados hasta ver que se dora. Yo los hice de 3 en 3 para evitar que se me quemaran, y colé 3 veces el aceite durante el proceso para retirar los restos de las torrijas que se iban quedando y quemando.

4.- Los colocamos sobre un plato con papel absorvente para retirarles el exceso de aceite y por último rebozamos con azúcar y canela.

5.- Una vez hechas las torrijas hacemos la salsa de chocolate: para ello en un cazo colocamos todos los ingredientes y calentamos a fuego medio-bajo sin dejar de remover hasta que se funda todo. 

6.- Para presentar nuestro plato vetemos un poco de la salsa de chocolate sobre un plato hondo y colocamos sobre ella las torrijas, acompañadas de alguna fruta.

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Espero que os haya gustado la receta de esta semana y que la pongáis en práctica.

Ya sabéis que podéis dejarnos cualquier duda o comentario aquí abajo que encantadísimos los contestaremos.

Un beso enorme y felices vacaciones a los que las pillan ya mimos!!!

Emblanco de bacalao

Holaaa!! Por fin he sacado un ratito para poder escribir esta receta...los que nos seguís por las RRSS estaréis al tanto ya de la fiesta de virus que fue la semana pasada mi casa, un caos, íbamos cayendo uno detrás de otro.

Empezó la pequeña, Isabel, y continuó su hermano, Arturo, lo que va siendo un virus gastrointestinal...así que imaginaros la zona 0, mi casa.

E imaginaros ¿¡que les daba yo de comer!? entre que no les apetecía nada, y que no toleraban mucho...pero ahí esta la abuela, siempre esta la abuela: "HAZLES UN EMBLANCO"

Mi cara fue un poema en ese momento: "¿ESO QUE ES?" 

Pues señoras y señores, mas bien jóvenes (como yo, jejeje, con treinta y ¿pocos?) esto es un emblanco.

Una especie de guiso que de verdad...esta buenísimo! ideal para los días de virus, resfriados...vamos, lo que va tocando ahora con este tiempo tan loco que tenemos.

La verdad que si os pongo la conversación en audios entre mi madre y yo explicándome la receta os moriríais de la risa, ni una se explicaba bien ni la otra entendía mucho, jejeje, pero al final conseguí hacer la receta, y además de sobresaliente.

Bueno, pues sin más dilación espero realmente que os guste, un emblanco con sabor a las "comidas de las abuelas".

EMBLANCO DE BACALAO

Cocinera: Mayte G./ Tiempo de preparación: 35 min./ Comensales: 4

Ingredientes:

1 tomate mediano

1 pimiento verde

1/2 cebolla grande

1 diente de ajo

3 patatas medianas

4 trozos de bacalao desalado

4 huevos (uno por comensal) se pueden suprimir

1-2 cucharadas de aceite de oliva

Sal y perejil 

Elaboración

1.- En una olla mediana ponemos la cebolla, el tomate lavado partido por la mitad, el pimiento lavado cortado en 4 trozos, el ajo y las patatas cortadas en rodajas gordas. Rellenamos con agua hasta 2-3 dedos por encima de los ingredientes y dejamos que hierva durante 15 minutos, removiendo de vez en cuando.

2.- Pasado este tiempo sacamos la verdura (exceptuando el ajo) y la batimos junto con un chorreoncito de aceite de oliva. Devolvemos la verdura triturada a la olla y agregamos también el bacalao. Dejamos cocer durante 10 minutos más. 

Antes de servirlo es conveniente probarlo de sal, ya que al echarle bacalao puede que si agregamos sal de más nos salga demasiado salado.

3.- Si vamos a cuajarle un huevo por comensal, cascamos los huevos y los agregamos al guiso 5 minutos antes de terminar, sin removerlo, para que no se nos rompan los huevos.

4.- Una vez servido en el plato, echamos perejil en especia por encima.

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¿No me digáis que no es un súper plato como los que nos preparan las abuelas?

Para mi fue todo un descubrimiento, a todos (virus incluidos) nos sentó muy bien y yo contentísima de ver que los niños poco a poco se lo iban comiendo sin rechistar.

Espero que a vosotros también os sirva para esos días en los que necesitamos a las mamás y a las abuelas pero no están cerca.

Un beso enorme.